Tratamiento del aborto incompleto
Aborto incompleto
Definición de aborto incompleto
Interrupción espontánea o provocada de una gestación antes de las 22 semanas desde el primer día de la última menstruación normal, con un peso aproximado de 500 gramos o 25 cm (OMS). La mayoría de abortos espontáneos son tempranos, el 80% ocurre en las primeras 12 semanas.
Un aborto es conocido como “incompleto” cuando se presenta una fuerte hemorragia y el cuello uterino se encuentra dilatado, pero el útero retiene tejido propio del embarazo. El cuerpo ha expulsado solo parte del tejido y de los productos de la gestación, ya que a veces no se logra eliminar todos los remanentes del embarazo. En dicho caso, es necesario realizar un tratamiento médico a fin de prevenir complicaciones.
Es importante tener en cuenta que un aborto incompleto es diferente a diagnosticar “aborto retenido, o frustro”. En estos casos, el embrión ha dejado de desarrollarse, pero la mujer no ha experimentado hemorragias ni sangrado, y el cuello uterino no se ha abierto.
Cuando el personal de salud interviene, las mujeres suelen brindar información sobre los síntomas, el tiempo de aparición y su estado de salud en general. No sobre la causa del aborto. Las preguntas del personal de salud no deben estar orientadas a identificar la causa del aborto, ya que el tratamiento no depende de eso.
Según normas del Ministerio de Salud (Resolución Ministerial 695-2006-/MINS), la atención no depende de ningún reporte policial, o fiscal. Las mujeres con un aborto en curso o en situación de emergencia obstétrica, tienen derecho a ser atendida sin ningún tipo de demora y cobro. Si alguien amenaza con denunciarla, las mujeres saben que tienen derecho a guardar silencio y abstenerte a declarar, así como también tienen derecho a exigir la presencia de un/a abogado/a o defensor/a (art. 71 Código Procesal Penal).
Tratamiento
El objetivo principal del tratamiento durante o después de un aborto incompleto es prevenir la hemorragia intensa y/o una infección. Entre más temprano está en el embarazo, es más probable que su cuerpo expulse todo el tejido fetal por sí mismo y no requiera más procedimientos médicos.
La atención y el tratamiento de un aborto incompleto son legales en todas partes. En los países en los cuales las mujeres pueden ser denunciadas por realizarse un aborto con pastillas, ellas cuidan de no decirle al equipo médico que intentaron un aborto. Suelen decir que han tenido un aborto espontáneo, ya que no existe un examen que permita identificar que la mujer se hizo un aborto intencional.
Generalmente el tratamiento para un aborto incompleto incluye examinar el útero y realizar una ecografía, para determinar si quedan restos. Dependiendo de la cantidad de restos de tejido que se encuentren se pueden dar medicamentos (misoprostol) o practicar un procedimiento quirúrgico llamado aspiración manual endouterina (AMEU), raspaje o legrado.
Aborto espontáneo
Hay casos en los cuales las mujeres se enfrentarán a un aborto espontáneo. El aborto espontáneo (también conocido como aborto natural o incompleto) es la pérdida de un feto antes de la semana 20 del embarazo. Aunque lo más frecuente es que ocurra antes de la semana 12.
Causas
Estos abortos pueden ocurrir por múltiples razones que impiden el desarrollo del feto dentro del útero. En la mitad o dos terceras partes de los casos están asociados a alteraciones cromosómicas.
Otras causas pueden ser:
- • Insuficiencia del cuello uterino
- • Enfermedades crónicas
- • El tabaquismo y alcoholismo se consideran productos tóxicos.
- • Enfermedades endocrinas (relacionadas a problemas hormonales)
- • Exposición a toxinas ambientales
- • Infecciones
- • Alteraciones uterinas
Los posibles síntomas son:
- • Retraso menstrual o amenorrea
- • Dolor abdominal tipo cólico
- • Sangrado vaginal
- • Fiebre y/o malestar general
